Seguro escuchaste hablar sobre alimentos saludables, súper alimentos, infaltables, permitidos, prohibidos, recomendados, adictivos y una infinita lista de características con las que endiosamos o demonizamos a los distintos alimentos.

Sin embargo, recorriendo las diferentes culturas alimenticias y las estadísticas de los países en cuanto a salud según sus tradiciones culinarias, hay una conclusión general que es fácil de aplicar y, a la vez, la más saludable: comer de todo pero en su justa medida.

Encontrar la porción adecuada de alimentos para cada uno de ellos, es el secreto de la salud nutricional. Pero, ¿cómo lograrlo?

Tomá nota de este listado que recomienda la comunidad médica para una alimentación saludable:

Frutas

Tres todos los días.

No repetir la misma fruta.

Intentar que sean de tres colores diferentes.

En invierno, que no falte un cítrico.

Vegetales no feculentos (aquellos que no contienen fécula)

Mientras más se consuma, mejor.

Deben ser variados y de todos los colores.

No repetir el mismo vegetal el mismo día.

Consumir crudos y cocidos.

Carnes

Una vez al día.

Incluir con más frecuencia el pescado.

Retirar piel y grasa visible antes de la cocción.

Lácteos

Tres por día: leche, queso y yogur.

Descremados a partir de los dos años de edad.

Legumbres y granos enteros

Todos los días tres porciones en el desayuno, la merienda y una comida.

Elegir las formas integrales.

Cereales, vegetales feculentos (papa, batata, mandioca, remolacha, choclo) y/o pastas

Una porción al día.

Aceites, frutos secos y semillas

Tres cucharadas o puñados cerrados por día.

¿Qué pasa con los alimentos no nutritivos?

Hay muchos alimentos que nos brindan una experiencia placentera al consumirlos y que no tienen especiales condiciones nutritivas. A diferencia de lo que se cree, ellos también pueden y deben ser incluidos en la alimentación. El secreto es que sea la cantidad indicada: una vez por día y una porción individual. Además, debemos prestar atención a lo que elegimos y disfrutarlo con tranquilidad, ya que eso también ayuda a controlar la ingesta y evitar los excesos.

Recordá que comer de todo a diario nos garantiza una dieta suficiente, diversa, adecuada y saludable. ¡Así podemos seguir disfrutando del placer de la comida sin poner en riesgo nuestra salud!